Nos sorprendio - o por lo menos a mi- el otro dia, saliendo en un pase de modelos, vestida , un traje casi trasparente...
Este.













Este nia muuuuuuuuy buena pinta, pero... siempre hay peros!! ¬¬ era una segunda parte, y desgraciadamente, no he encontrado la primera :( pero era portada dura y todo, de esos que tienen pinta de costar nos 22 o 23€...


Es una serie muy tierna y muy bonita, en cierta manera, diferente.
1.El nombre del viento-Patrick Rothtfuss
La Cazadora de sueños

La casa del torreón
La escalera Prohibida
The Giver 2: En Busca del Azul.
EL CIRCULO PERFECTO
Luna comanche
Dos coronas de Susana Eevee
Los Siete Reinos 2: Fuego
Al otro lado de las montanas al este de los Siete Reinos en una tierra rocosa y asediada por la guerra que se llama Dells, Fuego tiene 17 anos y es la ultima monstruo del reino con forma humana. Es preciosa en cuerpo y mente, tiene una cabellera de color rojo brillante que ondea al viento como una llama y comparte el poder de leer la mente y ejercer su influencia silenciosa sobre los humanos con sus congeneres, pero tiene un gran defecto que hace que estos no confien en ella, la odien, la aparten: sabe distinguir entre el bien y el mal. Cuando la conspiracion estalla para derrocar al rey, Fuego debera elegir entre la fidelidad a los suyos y el amor por un principe en cuya cabeza no puede penetrar.Sentía un dolor casi físico cuando el conde y la condesa entraban al mismo tiempo.. su amor mutuo era evidente, un vinculo genuino que les proporcionaba seguridad y felicidad. Hasta Logan y Serah intercambiaban a veces unas miradas que ponían de manifiesto que se gustaban. Esas miradas, ese amor, llenaba a Kylar de un anhelo tan hondo que creía que le abriría un hueco en el pecho. No era simple hambre; una rata de hermandad conocía el hambre igual que conocía las alcantarillas donde se acurrucaba buscando calor en invierno. El hambre no era comoda, pero resultaba familiar y no era algo que temer. Lo suyo era una sed, como si su cuerpo entero estubiese reseco, cuarteado, a punto de desmigajarse. Moriría de sed a orillas del lago más grande del mundo.
Todo aquello le estaba vedado. Para él, ese lago era un océano.
Era agua salada que solo le daría más y más sed, hasta causarle la locura y la muerte. El amor era la muerte de un ejecutor. Locura, debilidad, vulnerabilidad y muerte, no solo para el propio ejecutor, sino también para cualquiera que lo amase. En la vida de Azoth todo era muerte. Había jurado no amar jamas, pero cuando lo prometió no había visto nada parecido a lo que el conde y la condesa compartían. Resultaba tolerable si por lo menos le importase a alguien.
El Ángel de la Noche 1, El camino de las Sombras de Brent Weeks