Ella era la diosa de la oscuridad.
Sus ojos eran verdes de un color vivo. Sus labios, rojos, como la sangre que bebía.
Tenia unas largas piernas, para aprisionarte en el sexo salvaje que le gustaba.
En su sonrisa se escondía unos colmillos, muy disimulados, pero que se podían volver mortales.
Ella posó sus ojos en él, y sonrió.
-Pau, querido... - su voz era roroneante, susurrante, llena de una amenaza velada, que a él le encantaba.
Una sonrisa sensual se dibujo en su rostro, sin ocultar sus cuchillas. Pau también sonrió.
Ella se dirigió lenta, muy lentamente hacia él, con sus tacones de quilómetro, su paso lento y controlado, como observando a una presa.
Bueno... él sabia que lo era.
Todas las noches era su presa voluntaria.
Se puso a orcajadas encima de él, aun sonriendo, y le agarro el cabello con fuerza, para verlo sufrir, y entecerrando los ojos le pregunto:
-¿Cómo me llamo?- Vio como se relamía el labio superior, extasiada por el juego.
Pau no contestó. Sabia que le ponía más cuando se hacia el duro.
Por supuesto no contestó.
En los ojos de ella se vio una pista de diversión, un tanto maligna.
A Pau le encantaba verla así.
La de cabellos negros, se puso aun más encima de él, si aquello era posible, con una cara, un tanto distinta a la anterior, un poco más maligna, se incluso hacia él, aferrándole con más fuerza el cabello.
Aun sin perder por completo la calma, le volvió a preguntar.
-¿Cómo me llamo, humano?
A él ya no le dolía que él llamara de aquella manera, en un principio no le gustaba,. Pero sabia que ella lo hacia todo como una juego sexual, y no como si pensara que era inferior.
-No recudo tu nombre, vampiresa.- Le contraatacó con la misma moneda.
Los ojos de la morena se volvieron rendijas, cuchillos.
Con la mano libre, le cogió el rostro, con fuerza, y le hizo mirarla.
-No eres nada. ¿Sabes que podría aplastarte con un dedo? Di mi nombre.
Pau, riendo por dentro, porque sabia que ya estaba enfadada, que, realmente ahora podría morir, siguió.
Se quedo en completo silenció, con la mirada unida a ella.
Vio que la ira fluía de ella. Puso la mano que tenia sobre su mandíbula, a su cuello, y apretó.
-Dilo.
Aquello ya era una completa amenaza.
Siguió en silencio. Mirándola fijamente.
La de ojos verdes perdió casi por completo el control, y apretando aun su cuello, le zarandeó con fuerza, clavandole las uñas en la espalda.
Él jadeó, cerrando, sin querer, los ojos, perdiendo el contacto visual, solo un instante, pero fue suficiente.
Esta le soltó, de golpe, y callo sobre la cama.
Se quedo parada, miró sus manos.
Él sabia que sonreía.
Se llevo la mano derecha a los labios, saboreando la sangre que se había desprendido, y que tenia en sus dedos.
-Te fascina hacerme jugar, ¿verdad?
Pau sonrió.
-A ti te encanta, ¿no? Pues ya esta. He aprendido a disfrutar de este juego.
-Sí... y también has aprendido a no rendirte ante mi, así me gusta.
De nuevo lentamente, repto sobre la cama, hasta llegar a donde estaba él, y le alzo.
Lo saco de la cama, y después le empujo, solo un tanto, lo suficiente, como para que quedara sentado en ella.
Él le ofreció la mano, toda llena de cicatrices ofrecidas.
Ella la tomo, sonriente.
Lamió suavemente la piel de la muñeca de Pau y él jadeó, cerrando los ojos. No por dolor, por supuesto. Aun no.
Ni siquiera eso, después de el dolor momentáneo del principio, todo era placer.
Al final, ella le mordió.
Él gimió, tanto de dolor como de placer, y llevando la mano que no estaba haciendo nada bueno, la aferro de los cabellos.
La cabeza le daba vueltas, como siempre que se lo hacia, el placer era indescriptible.
-Foscor...-Gimió al fin, el nombre de ella.
Cuando lo hizo, Foscor sonrió. Siempre se rendía en aquel punto. Bueno, no podía evitar nombrarla en aquel punto.
Después de alimentarse, le haría el amor con furia, por hacerla esperar tanto para oír su nombre.
Nota: Foscor es Oscuridad en Valenciano.
Acabo de conocer tu blog!!
ResponderEliminarMe ha encantado! Te visitaré a menudo :)
Espero que el 2011 te brinde toda la felicidad, amor, salud y buenos amigos que te mereces.
Que el año nuevo que entra sean 365 días de sueños e ilusiones cumplidas.
¡Un beso desde las estrellas!
veroncita soy tere
ResponderEliminarme da pereza acceder a mi cuenta, a mi personalmente me a gustado!!!!! pense que de un momento a otro se lo montarian con velas, latigos, xDDDD
de donde sacaste esa idea para escribir esto?
un besazooo
lo de los latigos y velas podria haber pasado... le hubiera entancdo a una que yo me se,-sí, Anto, sientete nombrada xd- se me ocurrio...? volviendo de casa de enara... no se, me vino y me puse a escribir xD aun tengo que terminar el cap 2... xD
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarme gustaría seguirte no sé, en twitter o algo así...
tienes?
saludos!
@nixiemessrate